Seguridad en el hogar: Se recomiendo cambiar las contraseñas si tenemos la más mínima sospecha tanto de ordenadores, de smartphone, de correos, etc. Estas contraseñas tendrán que ser de seguridad alta.
También tendríamos que hacer una copia de seguridad por si perdiésemos los datos. Revisar las aplicaciones y programas para borrar los que no utilicemos es otra opción.
Por supuesto no nos vendrá mal instalar un antivirus actualizado y revisar la privacidad.
Compras online: Recomendamos el uso de páginas de fiabilidad y revisar la cuenta bancaria a menudo por si viésemos algún movimiento raro.
No hay que recordar que no abramos ningún correo extraño, enlaces sospechosos o archivos dudosos.
Infancia: Hay que decir, que este es un foco débil para la ciberseguridad. El cual tendremos que estar atentos y cambiar contraseñas y activar los controles parentales.